Se cumple el año en ciclos de ida y vuelta. Me siento cada vez más artista de proyectos de comienzo, y fin. De duración determinada. Proyectos personales, proyectos profesionales… en un año, en el que apenas puedo decir que haya tenido el más mínimo respiro. Me siento un poco cansado. En el último año, no he sentido más que el acabar de muchos proyectos, empezando por igual otros, y dejando personas detrás. Quizás es eso lo que más me pesa. Las personas que van quedando, poso a poso, dentro de mí. Y en especial, todo lo que significa el vivir en estaciones de paso. Trenes con destinos de ida, sentimientos con billetes de vuelta. Tengo el mal del viajero, un jet-lag que me dura semanas enteras, y una sensación de ganas de llorar por cualquier sensibilidad que me conmueva lo más mínimo.
Feliz Año. Besos a todos.
Desde tan lejos... nunca pensé que razonaba como el resto de la gente. Desde tan lejos, nunca imaginé que pudiera acercarme tanto al presente.
lunes, enero 01, 2007
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1 comentario:
Tus fines de semana de recepción y despedida son normales estando como estás en el centro de todos los caminos como canta sABINA. Al menos así tienes la oportunidad de ver a todo el mundo que es lo importante.
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