Desde tan lejos... nunca pensé que razonaba como el resto de la gente. Desde tan lejos, nunca imaginé que pudiera acercarme tanto al presente.

viernes, abril 21, 2006

Cerrado por vacaciones.


Etapa II. Siguiente destino, algún lugar de África.

Cerraré hasta el domingo 30.

Besos y abrazos a todos.

jueves, abril 20, 2006

Todo es teatro, todos somos actores.

Todo es un teatro. Todos son actores. No puedo evitar pensarlo. El papel es fácil, hacer de uno mismo es tan fácil...

No era lógico pensar de esa manera, pero a menudo tenía esa sensación.

El ciclo había cambiado. Todo había dado la vuelta. De repente, y por primera vez en tres años, llegaban tiempos que dan miedo. Se le avecinan decisiones trascendentales. Los hechos cada vez tienen menos lados a los que girar para darles la vuelta. Cuesta enfrentarse a lo que la constancia le ofrecía, mientras revoloteaban cada vez más pensamientos de vidas y motivos cada vez más diferentes. Y esto a una determinada edad, pesa. Tenía miedo de no escoger bien, de no saber, de no poder elegir, de defraudar, de equivocar.

Mientras se apretaba las gafas, trataba de responderse a sí mismo...

Lo único que debes hacer es afrontar en positivo las decisiones. No mirar atrás, no dejar que los motivos no reflejados encaminen los pasos a la desazón. Doler, tiene que doler, porque el riesgo, duele, pero recompensa. Cambian las estaciones, se repiten los días, los aniversarios, los viajes, las personas, las fiestas, las penas. Se repiten las horas, mientras todo cambio es tan sutil, que la inercia de todo lo que pasa te puede llevar a donde no quieres que te lleve, si no sabes reaccionar a tiempo.

Pero de nuevo las dudas surgían...

Y cómo acertar, si todo está bien, si todo parece bonito, si es tan complicado contentar a todo el mundo.

Y mientras las formas no acababan de convencerle, se respondía:

No se trata de contentar a todo el mundo, sino hacer feliz a los que con su felicidad llenan tu espacio. Y a veces para hacer feliz es necesario hacer el daño suficiente como para que reaccionen los corazones. Tenerlo todo es imposible. El mundo gira, se repite y los días pasan sin que nuestra relevancia signifique nada para el funcionamiento del sistema. Somos lo que pensamos, lo que vivimos, lo que sentimos. Somos los demás en nosotros. Son las experiencias, no las pertenencias.


Y de nuevo volvía a preguntarse porqué se sentía tan mal. Decorar macetas no era suficiente. Mezclar el rojo con el amarillo. No, mejor el azul y el amarillo. No, no puedo borrarlo. Otra maceta, otra planta. No pienses, no busques. El pincel sale de la pintura para expresar cerda a cerda, bajo el nervio del dedo, impulsado por la muñeca, sostenida por el brazo, pegada al hombro, sobre el que la cabeza transformaba pensamientos en colores, esbozos de quereres, estados y sinsabores.

El copa de vino asoma bajo el flexo, cubriendo de sombra rojiza la foto de la que salen cada uno de tus pensamientos, mientras vuelves a mojar el pincel, y te preguntas. Cuándo, cómo y donde. No es cierto, no es verdad. Pero el fin de un ciclo llega, menos mal que empezar de cero es tan fácil para los actores. Sólo hace falta hacer de uno mismo.

lunes, abril 17, 2006

A través del vidrio.


De los cuadros, de las pinturas. Sobre las personas, en blanco, quieto, descuidado, pero limpio. Asoma, se esconde, se acurruca. Es como el silencio. Es tibio sin ser soso. Es cálido, sin abrumar. Es el trazo del pincel. Es un paisaje y luego será otro. Son los colores, son la historia. Son marcos de plata, sin ser cargantes. Son modernos sin envidiar a los clásicos.

Museos, cuadros, esculturas.

Historias, vidas.

Artistas.

Sólo.

Artesanos.

Biografías, caminos.

Talleres, herramientas, personas.

martes, abril 11, 2006

Denuncia Petanca

Curiosa la resistencia de mi barrio. Sólo quedan unos pocos metros cuadrados de lo que fue el parque de la Arganzuela, inaugurado en 1969. Los que ya han vivido lo suficiente como para opinar de casi todo, juegan a la petanca bajo sus árboles, junto a las vallas que les separan de los ruidos y los polvos de la obra de la M-30. También luchamos los que usamos deportivamente sus caminos para expulsar las tensiones del día a día, los que al abrigo de un juego de mesa, una botella de cerveza, o una pelota se niegan a ceder un metro más a los cercados. Antaño se celebraba en este parque las fiestas de San Isidro, y más recientemente las de la Melonera. Hoy celebramos más sitio para nuestros coches.

Hoy en día el ser humano va colocando capas sobre capas, enterrando el pasado para repoblar el presente. Talamos árboles, para plantarlos a posteriori. Eso sí, nos ponen un puesto informativo. Nos informan del destrozo. Sí, ya me siento mejor, destrozan el parque, pero me informan, qué detalle. Todos sea que dentro de doscientos años, cuando vuelvan a hacer otra obra, encima de otra obra, encima de otra obra, se encuentren un trocito de fuente del parque actual, y tengan que paralizar las obras por conservar el monumento.

De momento, unos pocos combatientes con chándal, con bolas de petanca, con litronas, con perros, con gatos, y con pelotas, seguiremos aguantando el avance de las vallas.

lunes, abril 10, 2006

Para gustos, los colores



Naranja, Orange, Clémentine, Apfelsine.

¡ Tiempo, necesito tiempo!

Ya tengo tres plantas en casa, familia numerosa. Una la mayor, está en el mejor lugar del salón. La más pequeña, todavía es semilla, y le estoy habilitando una maceta de colores, principalmente, el naranja. A la del medio se pirra por una avispa de juguete. Aunque últimamente la he sorprendido mirando mucho al poto de la vecina de enfrente. Vamos, la vida misma.

jueves, abril 06, 2006

Crea tu propia novela

Me ha llamado la atención esta página:. En ella, pulsando F5 repetidas veces podemos crear nuestra propia novela de Dan Brown. Sí señor, y es que no hay nada como estar encasillado.

miércoles, abril 05, 2006

Post que nunca publicará ningún periódico

Nunca pensé que podía convertir charcos en riachuelos. Debí comer demasiadas alubias este fin de semana. Lo cierto es que todavía mi ropa está ahumada, y la torre de ropa lista para planchar empieza a perder por sí misma el equilibrio. Me falta tiempo para recuperar el aliento de los pasos que voy dando. Me conmueven hasta las señales de tráfico, y convivir con todos estos día me llena de vida. Los japoneses son unos artistas de la concentración y el minimalismo, y estos días me concentro en comprimir cada instante para poder saborearlo lo suficiente.

Todo me da vueltas en la cabeza, tengo nueva planta en casa, y en la mesilla se agolpan los libros, ávidos de conseguir que no duerma lo suficiente, como para llegar a salir del garaje por la mañana antes del cambio de turno del portero. Del portero simpático, al portero errático. Un mundo, vamos. Además cada vez tengo más claro que ver Sexo en Nueva York, y conocer el interior de las tiendas Woman`s Secret no te hace saberlo todo a cerca de las mujeres. Y para colmo la niña pequeña de los vecinos, desde sus cincuenta centímetros de altura me llama “señor”. Pues no, no estoy dispuesto a ser un señor, por muchos años que cumpla. Lo que sí es cierto es que para aprender idiomas lo mejor es tratar con oriundos.

Besos y abrazos a todos.

lunes, abril 03, 2006

Grandes y Pequeños

Durante el mes de Abril del año 1946, hace ya sesenta años, hubo un aviador francés que tuvo una idea, decidió escribir sobre la amistad, el amor, e ironizar a cerca de la vida. Y así nació “El Principito”

A los que lo leyeron, y no tienen un libro en la mesilla, pueden aprovechar para releerlo, sobre todo si lo leyeron cuando eran niños.

A los que no lo leyeron, ni de grandes ni de pequeños, tienen la oportunidad de leer este clásico, pequeño de tamaño, pero grande de contenido.



[Por la noche mirarás las estrellas. No te puedo mostrar donde se encuentra la mía, porque mi casa es muy pequeña. Será mejor así. Mi estrella será para ti, una de las estrellas. Entonces te agradará mirar todas las estrellas.]

Extracto de EL principito de Antoine de Saint Exupery