Desde tan lejos... nunca pensé que razonaba como el resto de la gente. Desde tan lejos, nunca imaginé que pudiera acercarme tanto al presente.

viernes, mayo 20, 2005

Lo que siempre admiré fue su manera de escribir. Cogía el lápiz de manera perfecta y plástica, como si estuviera acoplado en su mano. Al trazar las líneas de un dibujo o al escribir, el abundante vello que tenía en los dedos rozaba el papel o la mesa, haciendo un ruido increíble. Parecía que el dibujo salía de ese ruido y no de sus manos. La tonalidad de ese ruido definía el grosor de la línea, su trazado y su color. Era como algo mágico. A veces cerraba los ojos y escuchaba el sonido que hacía su mano al pintar algo y sentía como bajo sus manos salía el dibujo perfecto, la solución a la duda que le había planteado, la representación de su pensamiento. Había días en que intentaba imitar su trazado y sus dibujos, pero no podía. Mi mano era torpe y no lograba nada ni tan siquiera parecido.

 Posted by Hello

1 comentario:

Bo Peep dijo...

Tienes razón, hay personas que cogen el lápiz de forma diferente, como si fuera una extensión de sí mismos. ;)