Desde tan lejos... nunca pensé que razonaba como el resto de la gente. Desde tan lejos, nunca imaginé que pudiera acercarme tanto al presente.

viernes, mayo 13, 2005

Paleta de grises (cap. II)

Conforme se apeó de aquel tren de olor mustio, sintió que el aire fresco de la nueva y renaciente Barcelona, le golpeaba la cara. Pedro, caminó paso firme hacia la salida, mientras varios mendigos le miraban con los ojos del hambre y la tristeza. Su hermano le había dejado escrito en un papel dos direcciones. Una era la de un hostal de mala muerte en la calle Carrel des Tallers, y otra la de la fábrica de ladrillos de un primo lejano; lejano y poderoso. Lo más fiable en estos casos es preguntar a la taquillera de la estación. Con la destreza que dan los años, las arrugas y las desilusiones, la taquillera le invitó a coger la línea 15, que le dejaba en la plaza de castella, justo a unos pocos metros de lo que iba a ser su alojamiento durante los primeros meses. Esperó el autobús apurando un pitillo, hasta que con aire decidido, se montó y comenzó su camino hacia el hostal.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias por tu visita, Ladhu. He dado una vuelta por aqui y me gusta lo que encontré. Esta historia, me gusta.
Un beso.